Desde hace mucho tiempo hemos estado soñando con tecnologías que nos permita alterar nuestra realidad, modificar todo aquello que vemos y hasta sentimos en el mundo real, desde hace algunos años parece que nos acercamos cada vez más rápido al momento en el que eso sera posible.
Con el lanzamiento increíblemente exitoso de Oculus Rift en Kickstarter allá por el 2012, parece que se inauguró una nueva época de competencia por ser la primera empresa en traer la tecnología de la realidad virtual a nuestras vidas. Después de Oculus Rift llegaron Samsung y su Gear VR, el HTC Vive y más recientemente Microsoft con sus Holo Lens aunque estos más bien son un tema aparte. Cada empresa está siguiendo su propio enfoque para diseñar un dispositivo capaz de transportarnos a mundos virtuales mejores que la realidad en la que vivimos.
Cada vez más equipos se suman al desarrollo de experiencias inmersivas y llegados a principios de 2016 podemos comenzar a hablar de contenidos pensados para alterar nuestra realidad o llevarla a lo virtual, Go Pro o Google han hecho lo propio para crear dispositivos que faciliten la creación de contenidos de 360°. Por otro lado Facebook en su obsesión compulsiva por siempre ir un paso por delante de la competencia, después de la compra de Oculus Rift por la nada despreciable cantidad de $2 Billones de dólares, ha seguido impulsando el desarrollo de la tecnología y lanzo hace días una herramienta para la edición de videos en 360°, donde todo parece apuntar a una estrategia a largo plazo para impulsar esta nueva revolución y estar presente al mismo tiempo que se comience a adoptar de forma masiva estas plataformas.
Desde ahora hasta el momento en que finalmente se implante esto como una herramienta más en nuestra vida cotidiana puede pasar mucho tiempo, todos comprendemos completamente cuan difícil es la popularización de una nueva tecnología en términos de desarrollo de infraestructura e inversión económica pero una vez que alcancemos el punto óptimo para que se adopte de forma masiva el mundo puede, de nuevo, dar un giro de 180°.
En la cultura pop y en especial en la ciencia ficción hay cientos o miles de referencias sobre como sera el mundo una vez que estos desarrollos alcancen su madurez: nuevas técnicas para el diseño arquitectonico, experiencias inmersivas e interactivas en el cine y la televisión como las que experimentan en Lucasfilms, videojuegos que sean prácticamente indistinguibles de la realidad, una experiencia mejorada en las compras online con tiendas virtuales que superen en casi todos los aspectos a las reales o una redefinición de la educación tal como la conocemos ahora, son solo algunos de los ejemplos de lo que nos deparan las próximas décadas.
No todo sera tan hermoso como lo soñamos, una perfecta visión de esto esta retratada en la novela de Ernest Cline, pero si de algo estoy seguro es que la realidad que nos espera siempre está cambiando con nuestras acciones y cada día la línea que separa el mundo virtual del real es mucho más difusa. ¿Como seremos cuando la realidad no sea suficiente para nosotros?