Si alguien te dice que te tomes un remedio porque a su prima segunda le funcionó, ¿lo haces? Si te dicen que cada vez el mundo está peor ¿lo crees? Bueno no tienes de que preocuparte porque no eres el único, pero entender por qué te pasa esto podría ser bastante importante.
En otro artículo hablaba acerca de que a pesar de la perspectiva apocalíptica que podamos tener sobre el mundo las cosas en realidad van mejorando, sólo que no lo percibimos porque nuestro cerebro utiliza algo que se llama sesgos cognitivos
Los sesgos cognitivos son atajos que usa nuestro cerebro para analizar la información disponible a nuestro alcance para tomar decisiones en situaciones muy complejas, con demasiadas variables o que requieren rapidez. Como cuando estás a punto de ser comido por un león o te le tienes que declarar a la persona que te gusta.
Las noticias que vemos, los lugares donde vivimos, las personas con las que nos relacionamos, hasta la manera como pensamos sobre nosotros mismos influye en nuestras decisiones. Y aunque esto pueda parecer muy obvio este tema es uno de los menos explicados que tiene una gran influencia.
Desde hace algunos años en diversas partes del mundo, mayormente en países desarrollados, se están levantando grupos con ideales nacionalistas pidiendo el cierre de fronteras en sus respectivos países, alegando «el impacto negativo en sus economías». Estados Unidos es un buen ejemplo de eso, pero no es ni el primero ni el último país en hacerlo.
Muchos estudios posteriores a la elección del 2016 señalaron a los sesgos cognitivos como principales detonantes del movimiento que llevo a Donal Trump a ganar la presidencia de los Estados Unidos. Estos sesgos junto con las redes sociales funcionaron como cámaras de eco que hicieron creer a los ciudadanos lo que ellos querían, sin tener un punto de vista objetivo de la situación.
Como estos, hay muchos movimientos recientes que se basan en explotar las debilidades cognitivas de las personas para inducirlos a los comportamientos deseados. Básicamente toda la mercadotecnia moderna hace uso de esto y aunque en la mayoría de los casos no podemos deshacernos de ellos, comprender nuestras limitantes nos ayuda a anticiparnos a sus efectos y quien sabe tal vez un día nuestros inventos artificiales también tengan sesgos.